Desde la aparición del mundo informático y digital, se habla de arte analógico como una forma de diferenciar el resultado de las creaciones “hechas a mano” de aquellas hechas por medio de programas de computadora.
En términos más científicos, la información analógica es aquella que se trasmite por medio de ondas, y la información digital por medio de códigos binarios, compuestos por 0 y 1.
La luz y el sonido, al igual que el tacto, se trasmiten por medio de ondas y frecuencias. Nuestros sentidos perciben las cosas porque reciben sus ondas, y envían la información o los estímulos recibidos al cerebro para ser interpretados allí: es decir que nuestros sentidos son “analógicos” porque están diseñados para captar ondas: el oído medio recibe y trasmite las ondas sonoras que atraviesan el tímpano, par que podamos escuchar nuestro entorno. Los ojos reciben y clasifican las ondas, o las frecuencias de la luz, comprendiendo el volumen a partir del claro-oscuro y percibiendo el color en función de las longitudes de onda de la luz (verde, rojo, azul)
El universo digital descubre que casi cualquier tipo de información puede trasmitirse convirtiéndola en pulsos eléctricos, un poco como los códigos morse, donde a través de un circuito se envía electricidad o no se envía. Todos los sistemas informáticos existentes en la actualidad funcionan a partir de este principio: la información se codifica en ceros y unos, donde cero es “No trasmitir electricidad” y 1 es “trasmitir electricidad”.
Entonces: “Arte digital” es toda creación artística que se desarrolla por intermedio de computadoras y artefactos, como teléfonos celulares o tabletas digitales, que traducen todo gesto, forma, color y más, a códigos binarios (digitaliza la información) para luego presentarla en forma digital, o análoga nuevamente (imagen impresa, escultura hecha con plóter de corte de metales o impresoras 3D en polímeros, etc. o incluso discos de acetato grabados, como los de antes).
En contraposición a esto, ahora se habla de arte análogo o analógico, refiriéndose a toda creación o desarrollo que NO PASA por medios digitales, y que se elabora “Manualmente” como el dibujo hecho directamente en papel y no en una Wacom conectada a una PC, esculturas talladas directamente en la piedra o madera con cinceles y martillo, obras modeladas añadiendo material con las manos o imágenes coloreadas creadas con pinturas usando pinceles y espátulas directamente sobre un lienzo.
¿Por qué no decir simplemente arte “manual” o arte “tradicional”?
Porque esos términos, si bien podrían considerarse correctos, tienen otras connotaciones adicionales:
Hablar de “Arte Manual” hace fuertemente alusión a las “manualidades” de carácter artesanal y con funciones casi que exclusivamente decorativas en la mayoría de los casos. Esto puede llevar a confusiones que no son las más apreciadas por los artistas que pretenden diferenciarse de los artesanos y creadores aficionados de manualidades.
Hablar de arte “Tradicional” hace más referencia a la imitación de procesos de creación artística utilizados en la antigüedad, desde el siglo XIX hacia atrás, y que se centran en la conservación y repetición de metodologías y estéticas afianzadas en la tradición y la antigüedad, por lo que no aplica a muchos de los artistas más recientes o contemporáneos, que emplean otras metodologías, procesos o estéticas.
Entonces, a falta de un mejor término para poder diferenciar los procesos que no son digitales de aquellos que sí lo son, se ha aceptado y generalizado el uso del término “analógico y Análogo” para comunicarnos.
Hay mucho más que podría decirse sobre este tema y seguramente tendríamos material para un ensayo o un libro, pero la idea es aclarar un poco la confusión al respecto.
Por favor cuéntanos tu opinión al respecto o lo que sea que te gustaría añadir para complementar.